El mundo que Dios ha creado es hermoso. Nos brindó dominio y nos protegió de todo mal, pero nosotros, los humanos, lo hemos deteriorado. El llamado de Lambeth sobre el medio ambiente y el desarrollo sostenible emergió como una esperanza para la iglesia en Pakistán y en todo el mundo, evidenciando que aún hay esperanza y tiempo para salvar nuestro planeta. Este documento aspira a ser una guía que combina la palabra de Dios para ilustrar cómo las tres crisis medioambientales – el cambio climático, la pérdida de biodiversidad y la contaminación – han afectado la belleza de nuestro mundo.

Las palabras que me conmovieron hablan sobre nuestra interpretación de «dominación». Como humanos, ansiamos poder y, al tener dominio sobre algo, a veces perdemos control sobre nosotros mismos. Dios dijo en Jeremías 5:22 “¿No os amedrentaréis ante mí, que puse arena por término al mar, por ordenación eterna la cual no quebrantará?” Estableció la arena para que las aguas del mar no excedieran ese confín, pero debido a nuestras acciones, tales barreras han sido rebasadas por tsunamis, huracanes e inundaciones, devastando la vida de quienes residen cerca; arrebatándoles sus medios de vida, hogares y hasta sus propias vidas.

Soy anglicano, criado en Pakistán, un país seriamente afectado por el cambio climático. Sin embargo, muchas personas allí no son conscientes de esta amenaza global, excepto quienes tienen el privilegio de la educación. Ese es el desafío. Allí, la comunidad cristiana vive al margen de la sociedad, luchando cada día por ganar un pan digno para sus familias. El llamado de Lambeth, debido a su naturaleza inclusiva, marca un rumbo para que la Iglesia de Dios ilustre el camino hacia un mundo divino; un mundo en el que personas de todas las creencias y estratos sociales cohabiten. Es un documento guía que precisa ser implementado en su totalidad. Las iglesias tienen ahora una herramienta para integrar el cuidado de la creación en sus actividades y sermones.

El programa de Lambeth para el medio ambiente y el desarrollo sostenible insta a la responsabilidad y a la formación de discípulos, pues es imperativo salvar nuestro hogar común con todas las herramientas y medios posibles. El llamado de Lambeth nos exhorta a unirnos, subrayando la importancia de reconocer nuestras responsabilidades individuales y colectivas, como reducir el consumo de combustibles fósiles, optar por energías limpias, plantar árboles, reforestar, disminuir nuestra huella de carbono y combatir la contaminación.

Información adicional

Amal Sarah Diócesis de Raiwind – Iglesia de Pakistán

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